sábado, 3 de octubre de 2009

Diversidad y unidad

Todas las células -animales, vegetales, bacterianas o de hongos- funcionan utilizando mecanismos moleculares idénticos, derivados de la misma forma de vida que apareció en la tierra hace unos 4000 millones de años. La vida ha conquistado casi todos los hábitats del planeta, desde las zonas heladas de la antártida hasta las depresiones abisales oceánicas, pasando por los desiertos más inhóspitos. La diversidad de la vida es inmensa y los biólogos estiman que existen entre 50 y 100 millones de especies diferentes.

Cada año, la ciencia descubre nuevos hallazgos que evidencian la estrecha relación entre todas las especies. Los humanos y los chimpancés comparten el 99% de su material genético, y el 70% de ambas especies es idéntico al de los erizos de mar. Esa proximidad genética es la causa de que las moléculas constituyentes de los seres vivos sean fundamentalmente las mismas.




Gran diversidad en lo macroscópico, pero unidad en lo micro. Todos formando parte, inextricablemente, de la vida en el planeta.